Hallazgo en la explotación y estado de los animales
Una inspección en una nave ganadera de Parla sacó a la luz la muerte de alrededor de 50 ovejas entre un censo aproximado de 220 animales. Los ejemplares supervivientes presentaban signos de debilitamiento: problemas respiratorios, lesiones en las extremidades y afecciones mamarias, mientras que el entorno mostraba carencia de limpieza y cuidados básicos.
Riesgos sanitarios y consecuencias para la salud pública
El hallazgo de pienso en contacto directo con el suelo y restos de un ave muerta eleva el riesgo sanitario. Además de la pérdida animal, existen implicaciones sobre salud pública y la posible aparición de brotes entre el ganado. En los últimos cinco años se ha observado un incremento en incidentes relacionados con enfermedades en explotaciones pequeñas, lo que subraya la necesidad de controles preventivos.
Aspectos legales y administrativos que intervienen
Las normativas exigen llevar un registro de la explotación y garantizar revisiones veterinarias periódicas. La ausencia de documentación y el abandono de animales pueden derivar en sanciones administrativas e incluso en responsabilidades penales por maltrato o abandono, dependiendo de la gravedad y de las conclusiones de los forenses veterinarios.
Medidas prácticas para evitar situaciones similares
- Mantener un libro de manejo actualizado con entradas sobre vacunaciones y tratamientos.
- Almacenar el alimento en contenedores elevados y protegidos para evitar contaminación.
- Programar visitas veterinarias trimestrales y controles de bioseguridad.
- Formar a los cuidadores en detección temprana de enfermedades y manejo básico.
- Establecer protocolos de limpieza y gestión de estiércol para reducir vectores.
Próximos pasos esperados tras la intervención
La investigación dará paso a análisis post mortem para determinar causas exactas de mortalidad y a actuaciones administrativas sobre la explotación. Es probable que se exijan medidas de remediación y un plan de seguimiento para proteger al resto del rebaño y evitar riesgos comunitarios.
