Contexto y petición: qué se reclama y con qué intención
Una organización de pacientes ha presentado un escrito formal ante la Fiscalía para que se investigue la supuesta eliminación de mamografías almacenadas en los sistemas informáticos del servicio sanitario regional. La petición no solo exige que se determine si hubo borrado intencionado de archivos, sino que se dispongan medidas técnicas inmediatas para preservar servidores y registros que puedan constituir pruebas.
Riesgos técnicos que amenazan los registros radiológicos
Las imágenes médicas dependen de flujos informáticos complejos: almacenamiento en PACS, copias de seguridad y plataformas de historia clínica electrónica. Un fallo en cualquiera de estos elementos —migraciones mal gestionadas, políticas de retención insuficientes o sobrescritura automática— puede provocar la pérdida de estudios clínicos, incluidos los de cribado.
Investigaciones en otros ámbitos sanitarios apuntan que entre un 5% y un 12% de los incidentes de gestión de imágenes se relacionan con errores en las copias de seguridad o en las migraciones de sistemas. Aunque los porcentajes varían según la fuente, la conclusión común es que la falta de protocolos robustos eleva el riesgo de eliminación accidental o deliberada.
Posibles implicaciones legales y derechos de las pacientes
Si se confirma la desaparición de registros que pueden influir en un diagnóstico, se abren varias vías jurídicas. Desde la perspectiva penal podría considerarse ocultación de pruebas u obstrucción a la justicia; desde la administrativa y civil, habría responsabilidad por la pérdida de documentación clínica que impida el acceso a una segunda opinión o a acciones legales.
Además, la ausencia de imágenes complica el derecho de la persona a recabar su propia información sanitaria y a reclamar seguimiento adecuado. Por ello, la solicitud de actuación inmediata ante la Fiscalía plantea también la necesidad de proteger a quienes denuncian, mediante figuras como la comparecencia como testigos con medidas de seguridad.
Acciones urgentes recomendadas
- Realizar copia forense de servidores y repositorios de imágenes para evitar la pérdida de evidencias.
- Suspender cualquier limpieza automática o migración hasta completar la investigación técnica.
- Auditar los accesos y modificaciones en los historiales radiológicos para identificar manipulaciones.
- Ofrecer canales seguros para que las pacientes puedan reportar incidencias y solicitar reproducciones de sus estudios.
Qué pueden hacer las afectadas ahora
Quienes sospechen que sus pruebas han sido alteradas o suprimidas deberían solicitar por escrito la copia de su historia clínica y las imágenes; conservar cualquier comunicación con centros sanitarios; y, si es posible, obtener una segunda lectura presencial o en otro servicio radiológico. También es aconsejable pedir constancia de las fechas de acceso y de las personas que consultaron los estudios.
Reflexión final y exigencia de transparencia
La desaparición de imágenes diagnósticas plantea un problema técnico y ético. Más allá de esclarecer responsabilidades, es imprescindible que las administraciones implanten protocolos que garanticen la preservación de pruebas y la trazabilidad de los registros. Solo así se protege la salud individual y la confianza colectiva en el sistema sanitario.
Estimación del texto original: aproximadamente 440 palabras. Este artículo mantiene una extensión similar y ofrece un análisis práctico y orientado a medidas concretas para asegurar la integridad de las mamografías y los derechos de las pacientes.