Investigación de la Guardia Civil en Valencia
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha llevado a cabo una intervención en el Ayuntamiento de Valencia debido a investigaciones por presuntos delitos como la prevaricación, la malversación de caudales públicos y la falsedad documental. Esto está relacionado con un contrato de patrocinio de 14.500 euros más IVA, adjudicado por Juanma Badenas, exlíder de Vox en el consistorio, a la empresa Imedes, en la que trabaja el marido de una delegada del Gobierno.
Un entramado de irregularidades
Esta actuación judicial se inscribe en un contexto de irregularidades más amplio que afecta la gestión de Badenas al mando de Valencia Activa, la fundación municipal que promueve el empleo. La investigación surge en medio de un terremoto político tras informaciones recientes sobre cómo Badenas otorgó contratos públicos a una empresa vinculada a su entorno familiar. Uno de los casos más controversiales es un contrato de 156.030 euros para publicidad, en cuya preparación se detectó un posible amaño.
Detalles del contrato polémico
Documentos revelan que el marido de la delegada, Javier Cebrián, redactó el pliego de condiciones y lo entregó en el Ayuntamiento justo antes de la formalización del expediente. Posteriormente, se inició una licitación exprés que favoreció a Imedes, que ganó el contrato ante una única competidora que obtuvo puntuaciones muy bajas. Sorprendentemente, el texto oficial del contrato contenía fragmentos copiados del borrador presentado por la consultora beneficiaria.
Filtraciones y estrategias cuestionables
La situación se complica con la filtración de un audio donde Badenas discutía una estrategia de espionaje contra partidos como el PP, PSOE y Compromís. En el audio, se pedía a colaboradores que accedieran a información sensible, planeando usarla como arma política. Esto incluye la contratación de consultores externos para realizar análisis en la fundación municipal, lo cual podría implicar un uso inadecuado de recursos públicos.
Reacciones políticas y su impacto
A pesar de la gravedad de la situación, la dirección de Vox ha decidido reintegrar a Badenas y otros concejales al grupo municipal, una maniobra controvertida que ha generado malestar dentro del partido. Inicialmente habían sido expulsados, pero tras negociaciones con la alcaldesa de Valencia, asumieron roles menores en el Ayuntamiento, una decisión vista como un intento de consolidar poder político a cualquier coste.
El futuro de la coalición
La entrada de la UCO en el Ayuntamiento de Valencia puede ser solo el inicio de una investigación más profunda sobre las irregularidades en contratos públicos. Las pesquisas pueden implicar a varios actores políticos y se centran en la fundación Valencia Activa, que se sospecha fue utilizada para favorecer adjudicaciones no transparentes bajo la gestión de Badenas. Esto pone en riesgo la estabilidad de la coalición gubernamental y las promesas de transparencia que se han hecho en el ámbito político.